jueves, 19 de mayo de 2016

Semana Bolivariana y Día de la Mujer 2015
















Historia de la Escuela


     En el año 1957,  Rómulo Padrón primer adjudicatario de las 0,13 Leguas de tierra, vende bienhechurías a la sucesión Wells. Quienes en el mismo año, venden a INVERDICA y éstos continúan sucesivamente la venta a Inversiones El Palotal, los cuales nombran una junta de asociados; abandonando dicho lote sin ningún tipo de desarrollo. Pero en 1968 con la construcción del aeropuerto, el gobierno a través del Ministerio del Ambiente, Guardia Nacional y Consejo Municipal, toma la guardia y custodia de dichas tierras por ser cono de entrada y salida de las aeronaves. En el 2002 con la creación de la Ley de Tierra y Desarrollo Agrario, los campesinos solicitan ante el Instituto Agrario Nacional la permanencia o la ocupación para el desarrollo agrícola, el día 9  de febrero de ese año se inicia la ocupación a este lote por sus fundadores; Tulio Mayor, Nery Buelvas, Emelina Ayala, Nolberto González, Yuli Ramírez, Yin Bríñez, entre otros. Formados en su inicio como Asociación Cooperativa El Palotal. En el 2006 la Procuraduría General de la República en conjunto con el INTI realiza la adjudicación de 273 hectáreas con una Declaratoria de Permanencia, válida hasta la fecha. Esta declaratoria esta ceñida a unas condiciones de uso en la gaceta oficial 1.054 en fecha 14 de mayo de 1979 del Ministerio del Ambiente y Recursos Naturales. En el 2006 es conformado el primer Consejo Comunal del sector llamado C.C. Asentamiento Campesino El Palotal, quien hasta la fecha continúa funcionando. Cabe destacar que en el 2005 la comunidad es beneficiada con el servicio de energía eléctrica comunitaria y son conformados 10 comités conservacionistas de la Misión Árbol.
     
     Actualmente la comunidad está conformada por 220 familias de las cuales un 40% pertenecen a la etnia wayuu. Divididas en 142 parcelas, de las cuales 60 hectáreas fueron unidas al parcelamiento en el presente año. La fuente de producción económica de la mayoría de los habitantes es el trabajo agrícola, cultivando rubros como: yuca, ají, cebollín, cilantro, plátano, topocho... beneficiados con unas tierras fértiles.

     Practicantes de distintas culturas, predominado la religión del catolicismo. En el año 2009 se da inicio al primer espacio alternativo en el sector teniendo la iniciativa un grupo de estudiantes de la Misión Sucre, habitantes de esta comunidad y orientados por la luchadora social Betty Palmar, vecina de la parroquia San Isidro. Atendiendo a 48 niños y niñas en edades comprendidas de 3 a 16 años; quienes no estaban escolarizados. Desde el periodo escolar 2010- 2011; se empieza a trabajar con el nombre de Escuela Básica Rural Juana Ramírez… La Avanzadora; basándose en dicha heroína, ya que luego de sus batallas y luchas por la independencia de nuestro país, pasa a dedicarse al trabajo de las tierras; encontrándose así identificados con ella por su gran labor. Sin embargo hoy en día cuenta con el primer proyecto socio-productivo a nivel regional. Cabe resaltar que aún no cuenta con una estructura como tal, haciendo funciones en la casa comunal y en espera de la construcción de su estructura; teniendo el terreno destinado para dicho propósito con una extensión de 3,5 hectáreas asignadas a las instalaciones de la escuela y siembra de esta. Así mismo, los estudiantes han sido beneficiados con la Colección Bicentenario, proyecto Canaima, Programa de Alimentación Escolar; de igual forma la dotación del mobiliario (mesas-sillas, escritorios, pizarras…)  facilitado por la alcaldía de San Francisco.

Misión, Visión y Objetivos de la Escuela Básica Rural Juana Ramírez… La Avanzadora

 MISIÓN
Ofrecer un servicio educativo que asegure a los alumnos una educación suficiente y de calidad que contribuya como factor estratégico de justicia social, que los forme como sujetos competentes en donde se favorezca el desarrollo de sus habilidades para acceder a mejores condiciones de vida, aprendan a vivir en forma solidaria y democrática y sean capaces de transformar su entorno.


VISIÓN
Consolidar a la educación primaria como eje fundamental de la educación básica hasta alcanzar niveles de excelencia, conjuntando con responsabilidad los esfuerzos de autoridades y sociedad para brindar un servicio eficiente y eficaz que satisfaga plenamente las necesidades y expectativas de los educandos, logrando su desarrollo armónico e integral.


OBJETIVOS
-  Asegurar que los niños y niñas:
  • Adquieran y desarrollen las habilidades intelectuales que les permitan aprender permanentemente y con independencia, así como actuar con eficacia e iniciativa en las cuestiones prácticas de la vida cotidiana.
  • Adquieran los conocimientos fundamentales para comprender los fenómenos naturales, en particular los que se relacionan con la preservación de la salud, con la protección del ambiente y el uso racional de los recursos naturales, así como aquellos que proporcionan una visión organizada de la historia y la geografía de Venezuela.
  • Se formen éticamente mediante el conocimiento de sus derechos, deberes y la práctica de valores en su vida personal, en sus relaciones con los demás.
  • Desarrollen actitudes propicias para el aprecio y disfrute de las artes, así como del ejercicio físico y deportivo.

Biografía de Juana Ramírez, llamada La Avanzadora.

  Mujer valerosa que luchó por la independencia venezolana.
     Juana Ramírez se destacó por su pasión patriota, su deseo por la libertad, y su entrega a la lucha independentista. Defendió a Maturín del ejército de Domingo Monteverde en 1813, aquel glorioso 25 de mayo cuando logró que este grupo de mujeres se dirigiera hacia el enemigo español, y con gran valentía se les enfrentó hasta que los realistas cayeron vencidos.
     Juana nació el 12 de enero de 1790, en un poblado llamado Chaguaramal, cerca de Maturín, en tierras de la provincia de Barcelona. Su madre, llamada Guadalupe Ramírez, era una negra esclava, traída de África y comprada por la familia del General Andrés Rojas.
     La negra Guadalupe y su hija se dedicaban a trabajar las tierras que la familia Rojas tenía en Chaguaramal.
     Se dice que su padre fue uno de los Generales Rojas: Andrés o José Francisco. Doña Teresa Ramírez de Balderrama crió a Juana, la protegió y le dio su apellido.
     Así, pues, la niñez de Juana transcurrió en las haciendas del General Rojas en Chaguaramal.
     En 1813, Maturín era una aldea de casas con paredes de bahareque y techos de paja. Era una aldea muy pequeña. Perteneciente a la provincia de Barcelona.
     La noticia de los sucesos de 1810 y las ideas independentistas habían llegado a través de un rico ganadero maturinés que se hallaba en Trinidad e inmediatamente ganaron adeptos.
     La Familia Monagas y los Rojas, entre otras, rápidamente se unieron a la lucha y formaron sus ejércitos con los esclavos de sus haciendas.
     Siendo Juana, una adolescente de 15 años, ya se interesaba en acompañar al General Andrés Rojas a realizar las labores de la guerra independentista.
     Estuvo en las batallas que se realizaron en las cercanías de Maturín, contra Antonio Zuazola, de La Hoz, Monteverde y Morales. Era una negra alta, con mucho carácter y un gran coraje. Sabía infundir a sus compañeros un gran ímpetu hacia la lucha patriótica.
     Por los alrededores de Maturín, se ganaron cuatro batallas, entre 1813 y 1814: el 25 de mayo de 1813 (Alto de los Godos), Los Magueyes, Aragua, Uracoa. Se perdió una batalla, y con ella, se hundió no sólo Maturín sino también la Segunda República.
     En la batalla del 25 de mayo de 1813, Juana tuvo una significativa actuación. Ese día patriotas y realistas se enfrentaron en una dura lucha que tuvo su final al oscurecer el día.
     En el norte de Maturín, en la sabana llamada Altos de los Godos se reunieron los patriotas, esperando a Monteverde con sus dos mil hombres, que venía desde la Cruz de la Paloma.
     Como a las 11 de la mañana empezó el fuego. Los patriotas eran menos en número de soldados.
     Cerca de la Plaza Piar de Maturín, un grupo de mujeres bien resueltas se encontraban luchando también. Comandadas por Juana Ramírez, con apenas 23 años, atacaban al enemigo, atendían heridos y hasta disparaban cañones.
     La Batería de Mujeres la formaban, además de Juana Ramírez, "María Antonia (abuela de Eloy Palacios) y Juanita Ramírez, Marta Cumbale, Valentina Mina, Graciosa Barroso de Sifontes, Vicencia y Rosa Gómez, Dolores Betancourt Mota, Carmen Lanza y Luisa Gutiérrez, Isidora Argote, Eusebia Ramírez, Guadalupe Ramírez, Rosalía Uva, María Romero de López, Josefa Barrosos, Juana Carpio y Lorenza Rondón".
     Desde Altos de los Godos llegó la noticia de que los patriotas se les estaban acabando las municiones.
     Eran casi las 4 de la tarde, así que el Comandante Felipe Carrasquel, jefe de los patriotas en este encuentro, ordenó a Juana avanzar hasta Los Godos. Juana y su batería de mujeres, con gran coraje y valentía, iniciaron su avanzada.
     Entre disparos y cañonazos llegaron a auxiliar a los patriotas. En la batalla también estaban José Francisco Azcue y Manuel Piar viendo cómo la negra Juana luchaba con tanto esmero. Monteverde no le quedó más remedio que huir ante tal arremetida y dejó al Comandante Antonio Bosch y al Capitán Pedro Cabrera y otros en la batalla. Bosch y Cabrera murieron, al rato, bajo las lanzas patriotas.
     Como premio del triunfo los patriotas ganaron: armas, municiones, 6.000 pesos de plata, 3 cañones entre otros. Y los cofres de Monteverde.
     Las bajas fueron: 479 efectivos muertos, 27 oficiales realistas y centenares de muertos.
     Juana Ramírez se encargó, al terminar la batalla de dar sepultura a los realistas caídos. Estos fueron enterrados en un sitio llamado la "Mata de la Muerte", al pie de un árbol ubicado frente a la Iglesia San Ignacio, en lo que hoy es Fundemos.
     El 25 de mayo de 1813 se salvó Maturín. Sin embargo, el 11 de diciembre de 1814 la ciudad cayó en las manos asesinas del español Tomás Morales: arrasó con la aldea, quemó todas las casas y asesinó a todos los ancianos, niños y mujeres que pudo.
     En su mayoría era la población caraqueña y del centro que se había venido a Oriente cuando Boves entró a Caracas. Con esta batalla se termina de perder la Segunda República. Los patriotas sufren una gran derrota.
     Los pocos que se salvaron lograron irse a las montañas y desde allí en forma de guerrilleros combatieron a los realistas. Se alimentaban de ganado perdido por el monte, plantas y otros animales salvajes.
     Con el tiempo se atrevieron a fundar algunos poblados, cercanos a los que estaban antes de la quemazón de Morales. Juana siguió luchando como guerrillera por las montañas de El Tigre.
     Al independizarse Venezuela, Juana se estableció en Guacharacas (hoy San Vicente), Monagas. Formó una pequeña familia con sus cinco hijas: Clara, Juana, Juana Josefa y Victoria. Allí vivió de la agricultura. Murió en 1856, a los 66 años. Fue enterrada en el cementerio antiguo de Guacharacas en El Bajo.
     Un monumento, construido en 1975, recuerda el sitio donde reposaban sus restos hasta el día 23 de Octubre de 2015 cuando fueron trasladados al Panteón Nacional, en Caracas, lugar donde reposan los restos de los héroes y heroínas luchadores de la Independencia de nuestro país.
     Y allí casi al final de Av. Bolívar, cuando se acerca a la Av. Raúl Leoni, se encuentra el monumento que le rinde honores a tan admirada mujer.
     Allí está la Redoma de Juana La Avanzadora, en su estatua de bronce con el machete en la mano, arengando a los que luchan por la libertad. Que su monumento sirva para recordar que la libertad es un bien que debe conquistarse y, luego, defenderse.



Monumento Juana La Avanzadora. Realizado por el escultor Renzo Bianchini. 1952